Materiales:
2 bolitas de telgopor forradas en pana azul, 10 cm de trencilla de seda natural y 2 medias perlas pequeñas, para las bolitas. 6 dijes de color bronce, 8 cm de cadena, 2 cierres españoles, alambre con memoria, cuentas variadas a elección sobre los colores, azul, turquesa, verde dorado y natural.
Diseño y Armado:
Así como las plumas, los camafeos, las filigranas y el fieltro, los aros grandes en forma de argolla también están en la tendencia de la moda 2011.
Tomamos alambre con memoria y cortamos un poco más que una vuelta completa, para hacer el cierre y trabajar con comodidad. Luego elegimos los materiales posibles, en este caso quiero que predominen los azules. Siempre voy sacando 4 cuentas de cada clase, para asegurarme que no me faltarán para el segundo aro.
Empiezo con un aro, porque en este tendrá que nacer el diseño. El otro será copiado. ¿Qué tengo en cuenta? Que abajo haya una cuenta grande, que en la terminación haya cuentas pequeñas. Y a mí, particularmente me gusta que haya alguna cuenta grandecita en el tramo medio. En cuanto a los colores, para que den vida, hay que variarlos. Si bien en una vista rápida el aro se ve azul, tiene también dorado, verde, turquesa y natural. Hay cuentas de variadas formas y muchas de ellas son chatas (las llamamos separadores). No coloquemos dos piezas en dorado, coloquemos cuatro y bien distribuidas, lo mismo con los demás colores. Observá cómo los colores se repiten, dando armonía. Otra cosa a tener en cuenta es el peso del aro, cuidado con esto, no tentarse con bellas pero pesadas cuentas.
Es probable que a este primer aro lo desarmes varias veces hasta lograr el que dé con la armonía esperada. A veces se logra cambiando una pequeña cuenta de lugar, tomate tu tiempo, es importante. Increíble, pero si a tus ojos, el trabajo no está lindo, será muy difícil venderlo.
En el modelo que ves, he comenzado con la cuenta inferior grande, en este caso es una bolita de telgopor forrada en pana azul. Se compran así, yo sólo le he realizado una terminación con trencilla y media perla. Luego, como te expliqué en el párrafo anterior fui variando los elementos y al llegar arriba se hacen dos rulos en diferentes sentidos, viendo que enganchen bien. En el cierre así armado, he colocado un alfiler con un separador turquesa y una perlita dorada, luego un rulito que se prende al gancho español.
Y para rellenar apenas el vacío de la argolla, colgué del cierre de ella, dos pequeñas cadenitas (de 3 una y la otra de 5 eslabones) siempre de largo irregular, con tres dijecitos.
Argollas azules